Los ciclos menstruales comienzan a instalarse progresivamente en la mujer y dan el sello definitivo a la pubertad, aunque como evento son los últimos en presentarse luego de la aparición de vellos en genitales (Pubárquia), aparición del botón mamario (Telárquia) y desarrollo general de las características sexuales secundarias.
La aparición de la primera menstruación (Menárquia) ocurre dos a tres años posterior a la Telárquia. Si la primera menstruación es anterior a los 9 años debe ser considerada como una Menárquia Prematura y por lo tanto amerita evaluación y una serie de exámenes hormonales para determinar su origen.
Por otra parte si una niña no presenta ninguna de las características sexuales mencionadas antes de los 13 años ó no tiene su primera menstruación luego de 4 años de iniciados estos cambios ó, aunque presentes los cambios no existe menstruación antes de los 16 años, también debe ser evaluada.
En los dos años siguientes a la primera menstruación es frecuente la irregularidad menstrual y también periodos largos de atraso por un fenómeno de maduración del eje hormonal que maneja estos eventos.
Luego de la pubertad, los ciclos menstruales tienden a la regularidad aunque obviamente pueden existir variaciones consideradas normales entre una mujer y otra, y entre un ciclo y otro en la misma mujer.